El mundo se calla cuando tus gemidos atraviesan mis venas
El mundo proclama con devoción callada el instante de tus muslos
Se calla y olvida que nacimos
Con el apetito voraz de nuestras bocas
El mundo se calla
Como una fusa muda
Dibujando mis manos
Secas de sol y barro
En la historia redonda
De tus senos
El mundo se calla
Y se me pierde un bocado
En el laberinto de tu cuello
El mundo se calla
Lubricado
moviendo mis labios
Como una oración sagrada
de humedad
en la entrepierna de tu mar
El mundo se vuelve a callar
Ausentado en la longitud
Larguísima de tu orgasmo
El mundo calla ardiente
Arrodillado
Invadiendo mi abismo
Mi espacio
Derramándose sobre tu sexo